Hoy
es 11 de septiembre. Se cumplen dieciocho años ya del salvaje atentado terrorista
que destruyó las Torres Gemelas del WTC de Nueva York, que atacó la sede del Pentágono
en Washington y terminó por derribar un avión en las planicies de Pensilvania. Cuatro
fueron las aeronaves estrelladas, tres de ellas contra los objetos que los
terroristas marcaron. Todos sus ocupantes fueron asesinados, así como varios
miles de personas más en un día atroz. En la jornada de hoy, un recuerdo a las
vidas de esos inocentes, y a las de los muchos asesinados por el fanatismo terrorista,
caídos en nuestras calles, en la de los países cercanos o muy lejos. Recuerdo y
homenaje a sus figuras, dolor por su pérdida, desprecio a sus asesinos y la voluntad
de seguir firmes en la defensa de la libertad y la dignidad humana ante la
barbarie fanática que lucha por imponerse, sea religiosa, nacionalista o cualquier
otra la forma que adopte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario