¿Se acuerdan ustedes donde estábamos hace unos escasos meses? Ya camino de las elecciones de Marzo se dibujaba un panorama optimista, de pleno empleo y crecimiento, sólo oscurecido por voces de agoreros, pusilánimes y antipatriotas que alertaban de los riesgos de una crisis que estaba prohibido mentar. En el verano, ya pocos días del accidente de Barajas, el Ministro de Economía Pedro Solbes afirmaba que el crecimiento del tercer trimestre sería algo mejor que lo vivido en los meses anteriores y que la recesión no nos llegaría. Ilusión?, Confianza? Optimismo? O mero desconocimiento de la realidad? Quién lo sabe.
Los datos hechos públicos ayer por el Banco de España muestran un panorama desolador. El informe completo, que a ver si me lo leo el fin de semana, muestra unos datos de caída del PIB en el cuatro trimestres que supera por poco el 1%. Oficialmente desde ayer al mediodía España se ha unido al cada vez más numeroso y menos selecto grupo de los países sumidos en la recesión. Las cifras empiezan a describir una caída, experimentada con intensidad acelerada durante el año 2008, que es histórica. Todas las gráficas se hunden, se caen literalmente. No hay ajustes suaves, transiciones, sectores relevos ni nada por el estilo. Da la sensación de que la maquinaria económica del país se para, como un tren lanzado en unas vías que, de repente, pierde la tensión eléctrica, y se frena poco a poco. Todo se para. LA situación española no es muy diferente a al del resto de países de nuestro entrono, excepción hecha de que aquí creamos desempleo al mismo ritmo que los alemanes tornillos, y eso da un grado de dramatismo a nuestra crisis que se dejó ver en el programa de las preguntas a ZP de este Lunes, en el que el Presidente lanzó balones fuera y se agarró como si fuese la salvación al plan de ayuda a los ayuntamientos, que sospecho va a tener el mismo efecto que los famosos 400 euros del verano pasado. Sólo servirá para generar déficit, y quizás ingresos extras en algunas contratas municipales ya de por sí adulteradas, otorgadas a dedo y llenas de vicios de forma. Como bien señala el editorial de El País de hoy, medio poco sospechosos de ser una pepero antipatriota, “El Gobierno debería reconocer por fin que la recesión española puede estar muy cerca del peor de los escenarios y complementar su plan actual de creación temporal de empleo con otros orientados a mejorar la competitividad del sistema económico -energía, nuevas tecnologías, educación- que aumenten el empleo estable a medio plazo. Para ello, debe demostrar iniciativa y convicción. Justo lo que hasta ahora no ha tenido.” El gobierno y los agentes sociales, añadiría, porque los sindicatos están callados como buenos cobradores del presupuesto público y so osarán a manifestarse hasta que sus bases se les rebelen, y eso que se llama la patronal está más preocupada por conservar sus puestos dirigentes y que, en el caso de al actual cúpula directiva, el gobierno les ayude en el marrón que tienen organizado en aerolíneas Argentinas, a cambio de un silencio cómplice y cobarde. Y de mientras cada día decenas, cientos de autónomos y PYMEs mueren en el más absoluto abandono, sin que nadie haga nada por ellos, sin una línea de atención en los medios ni en las autoridades, que muestran su incompetencia cada día.
Y en medio de todo esto ayer presento el BBVA su beneficio de 2008, ahogado por la contraprogramación que le hizo el Santander de su aún más abultadas ganancias. ¿Por qué el gobierno no destina el dinero que da a esos bancos a perdonar el IVA y las Cotizaciones Sociales a las PYMEs? ¿No será, pensemos mal, que dado que tanto el PSOE como el PP tienen créditos concedidos por varias entidades buscan así conceder favores para que los bancos no ejecuten sus deudas? ¿Puede que en medio de esta emergencia nacional a los partidos les interese más su propia supervivencia que el bienestar de la gente que vive en España? No, no puedo ser tan mal pensado............... verdad?
No hay comentarios:
Publicar un comentario