jueves, julio 31, 2014

El engaño de las balanzas fiscales


Durante mi semana de vacaciones se presentaron las balanzas fiscales elaboradas, por encargo del Ministerio de Hacienda, a un equipo dirigido por Ángel de la Fuente, economista experto en política regional y que es muy bueno y sabe mucho de lo suyo (he trabajado un poco para él, hemos hablado y esa es la sensación que me ha transmitido). Las balanzas pretenden medir la diferencia que existe entre lo que se recauda en una Comunidad Autónoma y lo que se gasta en ella, para ver si existe un tratamiento fiscal injusto entre unas y otras. Obviamente, existe una diferencia de trato y, en general, es muy justa.

Esta metodología, esta manera de analizar los ingresos y gastos, es falaz, no tiene mucho sentido económico y se basa en un supuesto de partida que es profundamente erróneo e injusto, el medir lo que aportan los territorios, cuando los territorios no aportan nada. Los impuestos los pagan los ciudadanos y las empresas que están en un lugar determinado, y será el número y renta de los contribuyentes los que determinen lo que se haya recaudado en el lugar. Para los nacionalistas de todo tipo es el suelo, la tierra, la que recibe y paga, y los nombres que se le hayan dado (Cataluña, Bizkaia, Mondoñedo, Peralejos de las Truchas, etc) son el sufriente sujeto pasivo del impuesto o el receptor de la inversión. Y esto no es así. El resultado del trabajo de Ángel de la Fuente y su equipo puso de manifiesto que, por regla general, las comunidades en las que reside gente con mayor nivel de renta, personas más ricas, son aquellas en las que se recaudan más impuestos y, por tanto, sufragan los servicios de las personas que tienen menos renta y que viven en otros territorios. Como las comunidades donde más ricos viven son Madrid y Cataluña serán estas las que tengan mayor “déficit fiscal” lo cual es tan obvio como falaz. Si el sistema impositivo es progresivo tiene toda la lógica del mundo que allí donde se concentren las rentas se genere mayor recaudación, lo cual sirve para que los dirigentes de esas comunidades se enreden en su bandera y clamen al cielo por su injusto tratamiento, cuando lo que dice el análisis es que son los que presiden los territorios donde hay más ricos y, por tanto, menos impuestos quieren pagar. En fin, la eterna queja de los que tienen respecto a los que no. Para ver que este análisis no tiene sentido podríamos hacerlo cambiando la configuración espacial del mismo. Cojamos, por ejemplo, la Comunidad de Madrid, y consideremos cada municipio como si fuera una CCAA. Seguro que el estudio concluye que los municipios con más renta son los que financian a los que menos tienen (¿eso implica que existe un agravio fiscal sobre Pozuelo de Alarcón, el de mayor renta per cápita de la región?). O centrémonos sólo en la ciudad de Madrid, en los agraviados residentes del barrio de, por ejemplo, Salamanca, en donde se recaudarán muchos más impuestos que en Villaverde Alto y Bajo. Qué vergüenza el agravio que sufren los residentes de las manzanas salamanquesas, ¿verdad? ¿Nos uniremos a sus manifestaciones reclamando un “pacto fiscal” que ofrezca una igualdad de trato impositivo a esos pobres grandes contribuyentes frente a los aprovechados del sur de la ciudad que tan poco aportan? Como verán el argumento no tiene ni pies ni cabeza, y a medida que uno va cambiando el ámbito geográfico del estudio se puede encontrar con situaciones similares y presuntos agravios que no hacen sino reflejar la desigualdad de la distribución de la renta y la progresividad fiscal del impuesto (y todo ello si no se producen evasiones a lo Pujol, claro está).

Lo que si detecta el estudio de de la Fuente es que existe una gran excepción a esta norma, una distorsión, que es la que se vive en el País Vasco y Navarra, en donde gracias al concierto económico, al tributación en esas regiones, donde la renta per cápita es muy superior a la media nacional, apenas aporta nada a la caja común y, por tanto, sus ciudadanos están mucho mejor financiados que el resto. Son, por así decirlo, ricos con impuestos comunes bajos, al no haber ese proceso de transferencia que les detrae renta. Es una situación anómala, producto del pasado, que la Leu, empezando por la Constitución, reconoce, pero que no tiene mucho sentido hoy en día y que, desde luego, es imposible de extender a otras regiones ricas. Aunque los pudientes que viven en ellas lo pedirán de manera insistente, y algún caso se les hará.

miércoles, julio 30, 2014

Artur Mas es un español de pura cepa


Hoy se celebra la muy esperada reunión entre Rajoy y Mas en la Moncloa, de la que se espera tanto como se teme, en la que un acuerdo parece una quimera sólo el hecho de que tenga lugar ya es considerado como un éxito, tras meses de desencuentros y tensión creciente. Es casi seguro que las comparecencias tras la reunión sean separadas y distanciadas, recibiendo Artur Mas a la prensa en Blanquerna, la sede de la Generalitat de Cataluña en Madrid, en la calle Alcalá, justo al lado del Círculo de Bellas Artes. Pose separatista, independientemente de si la reunión resulta fructífera o no, que ojalá sí lo sea.

En el fondo Mas, aunque reniegue profundamente de ello, es tan español que actúa inconscientemente como tal. Lidera un partido asolado por la corrupción, cuya sede está embargada para avalar las responsabilidades que se puedan derivar del caso Palau, y alcanzó la cúspide del mismo a través de un proceso de cooptación y dedocracia típico de la policía española. Pero es que ayer, en el discurso que hizo en comparecencia pública para explicar las decisiones que el partido había tomado respecto a Jordi Pujol, quitándole toda una serie de privilegios que no los tenía ni la ínclita Maleni, mas hizo el discurso de apología de la corrupción, de defensa del delincuente, de exculpación del delito, que sólo se oye en la política española, y que es un reflejo de cómo la sociedad de este país, hasta cierto punto enferma, no ve en el corrupto a un delincuente que le roba, sino a un listo que es capaz de huir del destino “pringao” de los demás, y suscita por ello admiración y envidia. Sus palabras exactas fueron “siento pena, compasión y un dolor muy grande” y todo ello por una figura que días atrás había confesado que era un contumaz defraudador de impuestos, de alguien que se hacía llamar “honorable” y que tenía una conducta personal muy alejada de ese alto concepto. De alguien que enarbolaba la ejemplaridad como bandera, que acusaba a los demás de derrochar dinero y de no ser trabajadores (siempre con un tono de racista superioridad) y que luego lo que ganaba, de formas diversas y algunas muy oscuras, no lo declaraba. A riesgo de ser demagógico, ayer Mas no mostró pena por las camas de los hospitales o las aulas de colegios que se han detenido que cerrar en Cataluña y que, si Pujol hubiera pagado, a lo mejor no tenían por qué haberse clausurado. Mas no sintió lástima por las inversiones frenadas, las obras paradas o las asistencias sociales que, financiadas por los impuestos de los ciudadanos, están paradas o abandonadas, y que nunca recibieron las cantidades que Pujol debió haber abonado legalmente para su mantenimiento. Mas no mostró compasión alguna con los millones de catalanes que han visto cómo sus impuestos, de todo tipo y condición, subían a lo largo de estos años para sufragar inmensas deudas contraídas por su gobierno, mientras que uno de los ciudadanos más ricos de la región lo era aún más gracias a que defraudaba a Hacienda. No, nada de lo anterior. Más sintió pena por ver como el que le había ascendido al poder ahora caía porque no podía ocultar su delito, Mas sintió compasión por su mentor, y le produjo un inmenso dolor que lo que nunca debió conocerse ni investigarse ahora vaya a salir a la luz, destruyendo en parte la estructura de su partido y, con ello, las bases del poder que ahora ocupa, y ve cómo se escapa de sus manos como fina arena de playa. Eso es lo que le hizo sufrir ayer a Mas, no el delito, sino las consecuencias que para él se deriven de haberlo aireado.

Y esa respuesta de Mas ante la corrupción es la misma que la que muestra el PP ante Bárcenas, el PSOE ante los EREs, la UGT y CCOO ante esos mismos EREs, el PNV ante el caso Epsylon y otros muchos, y así indefinidamente. La total exculpación del delincuente porque es uno de los nuestros, la acusación sin fin al corrupto de enfrente, y el menosprecio, cuando no desprecio, ante el ciudadano, que tiene que pagar impuestos, al que no se le permite ni una, y que observa angustiado como ya no queda nadie que no haya robado delante de sus narices. Mas es, por lo tanto, español hasta la médula, y lo muestra en ese comportamiento enfermo, que es en parte lo que nos ha conducido hasta la crisis que ahora vivimos y que nos impedirá salir de la misma si no lo corregimos de una vez.

martes, julio 29, 2014

Puyol ens roba


Ha causado un enorme revuelo la confesión, por escrito, de Jordi Pujol, reconociendo que poseía patrimonio en el extranjero, en confortables paraísos fiscales, desde hace algo más de treinta años, producto de una herencia no declarada, y que no ha podido regularizar hasta hace apenas unas semanas. La carta, que se hizo pública el fin de semana, pedía perdón por el error y admitía haber traicionado la confianza de aquellos que en él la habían depositado. Consideraba la confesión como un acto expiativo con ánimo de saldar la culpa y ser perdonado por ello. Tras la revelación, gran conmoción, disgusto y rasgado público de vestiduras por parte de casi todo el mundo. Qué gran obra de teatro colectivo.

Hay dos cosas de la confesión de Pujol que no logro entender. La primera, y más sustancial, es cómo casi todo el mundo puede ahora tener el valor de declararse sorprendido por algo que era conocido por casi todo el mundo, la existencia de una fortuna amasada por la familia Pujol antes de que Jordi llegase al Palau de la Generalitat, y que durante los años de su gobierno creció sin límites, mediante adjudicaciones sospechosas, contratos oscuros y comisiones de uno y otro lado. La implicación de los Pujol y su Consejero de Economía, Maciá Alavedra, en el caso de Banca Catalana, la quiebra de una entidad financiera que fue creada por, entre otros, el padre fundador de la dinastía, se saldó sin condenas ni delitos adjudicados, porque en aquellos años Pujol era el Rey de Cataluña y el Virrey de España, un personaje con un poder inmenso, gran prestigio, capaz de derrumbar gobiernos en la Moncloa con sólo insinuarlo, y que hacía y deshacía en Barcelona y alrededores a su antojo. CiU, el partido que el lideraba, era, y en parte sigue siéndolo, una fabulosa máquina de contratación y adjudicación de dinero público, que suscitaba el interés de todos los que deseaban medrar o hacer negocios en la por otro lado siempre próspera Cataluña. A medida que el volumen de las comisiones y los escándalos iban creciendo, con unos rumores que eran cada vez más difíciles de acallar, Pujol empezó a colocarse en un discreto segundo plano, amparado tras la sombra de sus hijos, que como príncipes intocables vivían y gestionaban los negocios sin control alguno, con cifras de patrimonio que se estiman en cientos de millones de euros, mientras que CiU iba elevando poco a poco su discurso nacionalista independentista, para tratar de cubrir con la bandera catalana toda la pasta que iba acumulando a los ojos de todo el mundo. El día en el que Pascual Maragall dijo aquello del 3% en la sede del parlamento catalán y todo el mundo calló se hizo público, a ojos de todo el mundo, el sistema de financiación de CiU, que era conocido por los partidos catalanes, y que ninguno al parecer discutía ni encontraba delictivo. Ese silencio fue una confesión de culpabilidad en toda regla que, curiosamente, nadie tomo como tal, por miedo a enfrentarse a un nacionalismo desatado que consideraba ataques a la sacrosanta patria todas aquellas denuncias que buscaban saber cómo se había amasado, y cuánta era la fortuna que los Pujol y otros miembros de las élites nacionalistas habían construido a lo largo de tantos años. El caso Milet, también conocido como Palau de la Música, empezó a revelar nombres de grandes familias convergentes, en las que casi todos sus miembros estaban implicados, de una manera u otra, en comisiones ilegales y concesiones opacas. ¿La respuesta? Más nacionalismo, por supuesto. “España ens roba” e independentismo a ultranza, quizás para evitar que alguna de las instituciones españolas que aún persiguen la corrupción (quedan, cada vez menos, pero aún la hay) pudiera pillarse en flagrante delito. Por lo tanto, ¿a qué viene tanta hipocresía y rasgado de vestiduras falces?

La otra pregunta, menor en entidad pero no en interés (sin porcentajes en este caso) es por los tiempos. ¿Por qué Pujol cuenta esto ahora, tres días antes de la reunión de Rajoy con Artur Más? Mañana se reúnen ambos en Moncloa y la confesión de Pujol deja a Mas en una posición, como mínimo, vergonzosa. Recordemos que Mas fue consejero de Economía y Hacienda en los últimos gobiernos del “molt honorable” así que tener el fraude fiscal en su despacho de al lado y no saberlo (y no digo más para no meterme en un lío) no deja de ser curioso. ¿Pujol disparando a los pies de CiU y el proceso soberanista? ¿Pujol acabando con su descarriado delfín Mas? Difícil de creer.

lunes, julio 28, 2014

El verano desata las pasiones (internacionales)


Llego a Madrid tras una semana de vacaciones en Elorrio y la encuentro como todos los veranos, recalentada, sudorosa, ardiente, sin tregua alguna para el que a ella llega, esperando al visitante con la afilada daga del calor, presta a clavarla cuando menos se lo espere, quizás por la noche, en medio de un sueño mediodesvelado que se revela húmedo pero no por la pasión, sino por el mero calor que todo lo rodea. La imagen del verano, rural o urbana, es la de sed, sudor y siesta, que dijo el clásico meteorólogo. Madrid la cumple a rajatabla.

Días tranquilos por arriba, sin mucha cosa que contar, pero todo lo contrario en el mundo, que parece haberse vuelto loco, no se si por el calor o porque ya le tocaba. Poner los telediarios esta semana era adentrarse en un curso acelerado de geopolítica internacional que te iba llevando de guerra en guerra, de conflicto en batalla, sin solución de continuidad. Ahora mismo tenemos abiertos dos frentes muy claros que pintan mal y que no van a ser de rápida solución. Por una parte se encuentra Ucrania, donde el derribo del avión comercial por parte de los prorusos volvió a proporcionar gasolina al conflicto y relevancia mediática. Antes del suceso del avión se mataban en torno a la treintena de personas al día en las zonas en disputa entre Rusia y Kiev, pero el tema ya había dejado de ser portada. La salvajada del avión volvió a llevar a los periodistas sobre el terreno, y de mientras los editores lo consideren útil, nos contarán como se siguen matando día a día en el este del país, sin que haya información fiable más allá de la propaganda de uno y otro bando y la constatación de que lo que allí pasa es muy feo. El otro conflicto, agudizado estas últimas semanas, es el de la guerra entre Israel y Hamás, que cuesta la vida sobre todo a los palestinos que malviven en la franja de Gaza. Más de mil muertos en un área especialmente sensible, un Israel que no cesa de bombardear para ganar una guerra que, militarmente, es imposible que pierda, pero que de hecho ya ha perdido en los demás frentes, ante un Hamás que brinda con te (dado que no pueden tomar alcohol) cada vez que unos niños palestinos son asesinados, a sabiendas de que esa es la propaganda que necesita para reforzarse en la franja y adquirir respetabilidad. Y no podemos olvidar que esta guerra de Gaza se da en medio de la ya continua y desatada guerra que se vive en medio mundo islámico, entre chiitas y sunitas. En la práctica uno puede viajar desde las costas de Gaza hasta el estuario de Basora, de momento en Irak, de guerra en guerra, de disparo en bombazo, sin solución de continuidad, todo ello aderezado con algunos conflictos locales como el que se vive en Libia, el caos absoluto, y las frecuentes y olvidadas campañas terroristas que Al Queda desata en Yemen cada dos por tres. La zona en su conjunto parece caminar hacia una inestabilidad cada vez más acusada y profunda, y es muy difícil saber en qué va a desembocar. La influencia de las potencias occidentales cada vez es menor y el peso de las potencias regionales, el chií Irán y la suní Arabia Saudí, que se enfrentan a través de peones por ellos controlados (IS, Hamas, Hezbola, Al Asad, etc) se encaminan cada vez más hacia un punto en el que, si nadie lo evita, lucharán de tú a tú, lo que hace más necesario que nunca el acuerdo con Teherán para la renuncia de su programa atómico. Todo, como ven pesadillesco.

Si en el caso de Ucrania el conflicto se prevé largo, en oriente, próximo y medio, es ya eterno. Cada propuesta de paz para el caos entre Israel y Palestina se salda con un débil acuerdo que resulta ser roto por una violencia de intensidad superior a la pasada. EEUU no logra sentar a ambas partes en la mesa, y si antes uno de los problemas era que los árabes le acusaban de parcialidad proisraelí, ahora puede darse el caso de que en Jerusalén tampoco sea el amigo americano tan bien visto como lo fue en el pasado. Y no tengo dudas de que estas bombas de hoy serán la mecha que encienda nuevas bombas en el futuro. Así de caliente se nos presenta el verano.

viernes, julio 18, 2014

Ayer se desataron todos los infiernos


El título de hoy pretende ser un homenaje al gran libro de Max Hastings sobre la II Guerra Mundial, y refleja muy bien la sensación que me entraba a lo largo de la tarde y noche de ayer, en la que todos los cisnes se volvieron negros pájaros de mal agüero y no dejaban de comunicarse malas noticias unos a otros. Israel dio inicio a la ofensiva terrestre sobre Gaza tras una jornada de dudas, rumores de alto el fuego y desmentidos de todos los lados, y en Libia todo indicaba que la milicia islamista que lleva varios días tratando de hacerse con el control de Trípoli, la capital, avanzaba con fuerza tras controlar el aeropuerto de la ciudad.

Y, por supuesto, el avión. Cuando ayer por la tarde, en el trabajo, vi de refilón en la web que un avión de Malasyan Airlines había desaparecido me dije a mi mismo “no, no puede ser, otro no” dado que es la compañía que “perdió” el avión sobre el índico que durante los primeros meses del año dio mucho que hablar, y del que no se sabe realmente nada (y al paso que vamos ni se sabrá). Al fijarme más en la noticia comprobé que de desaparecido poco, más bien estrellado, y sobre el territorio de Ucrania….. pues pocos sitios hay peores para estrellarse, pensé, si ha caído en la zona este del país se van a disputar sus despojos las milicias prorusas y el ejército de Kiev. Al poco la noticia ya hablaba de que el accidente se había producido a pocos kilómetros de Donetsk, la capital de los separatistas, una zona de intensos combates desde hace semanas, en la que los prorusos han conseguido derribar aviones y helicópteros militares de Kiev, aunque de menor dimensión y altitud de vuelo que la que lleva un avión comercial. Los datos, en todo caso, eran escalofriantes. Un Boeing 777 cargado hasta arriba para hacer un viaje intercontinental desde Ámsterdam a Kuala Lumpur, con 295 personas a bordo, que se suponían todas muertas. A medida que pasaban los minutos empezó a desatarse una ceremonia de la confusión en la que lo único que quedaba claro es que el avión se había estrellado, y nada más. El gobierno de Kiev se apresuró a acusar a los separatistas de haber sido ellos los que lo habían abatido, mientras que portavoces de los insurrectos negaban las acusaciones y las rebotaban contra el ejército ucraniano. La supuesta tecnología rusa de los misiles Buck, que ya se encuentran en manos de las dos partes enfrentadas, disparó los rumores sobre hasta qué punto el propio ejército ruso podría estar implicado, por acción o colaboración en lo que empezaba a no calificarse como accidente, y que esta mañana se confirma plenamente como un ataque por parte de todas las fuentes. A partir de aquí, y sin olvidar en ningún momento la conmoción de las familias de los pasajeros, unas trescientas familias incrédulas y aterradas, y el estado de shock en el que se puede encontrar Holanda, país originario de 154 de los fallecidos, algo más de la mitad del total de viajeros, el escenario internacional que se abre produce un vértigo difícil de soportar. Si, como prueban algunas conversaciones filtradas por el ejército ucraniano, en las que rebeldes de Donetsk hablan con responsables militares rusos sobre las acciones que desarrollan en el terreno y el avión que acaban de derribar, producidas supuestamente ayer, la posición de no ya los rebeldes, sino de la propia Rusia, empezaría a resultar insostenible. La declaración expresada ayer por Putin en la que lamenta las víctimas y culpabiliza al gobierno de Kiev por recrudecer la guerra que se libra en su patio trasero es una forma indirecta de asumir que fueron los rebeldes los que, por deseo o error, abatieron el avión, quizás al confundirlo con un transporte militar ucraniano. En todo caso las dudas son muchas, las certezas pocas, y el miedo total.

Porque, supongamos, se demuestra que han sido los rebeldes los que lo han derribado ¿Qué ocurre entonces? ¿Laminaría Kiev a los atrincherados en Donetsk como venganza internacional? ¿Y si se demuestra una participación de Rusia, se declararía una guerra entre ambos países sobre los restos humeantes del avión, al ser la prueba de la colaboración rusa con los rebeldes? ¿Y si hubiera sido el ejército de Kiev el que, deseándolo o no, hubiera disparado el misil que acabó con el avión? ¿Asaltamos nosotros Ucrania como castigo? Un escenario de pesadilla vuelve a resurgir en el torturado este de Europa, y su final se antoja muy muy lejano.

La semana que viene estoy de vacaciones en Elorrio, por lo que no habrá blog. Disfruten del ocio lo que puedan y, dado como está el panorama informativo, no se si recomendarles que lo sigan o no. Si todo va bien volveré a escribir para ustedes a partir del Lunes 28 de Julio

jueves, julio 17, 2014

El banco de los BRICS


Una de las noticias más interesantes de la semana, y que puede tener un enorme recorrido e importancia si se consolida finalmente, es la decisión adoptada por Brasil, Rusia, Indica, China y Sudáfrica, los llamados BRICS, de crear un banco entre ellos que, de manera alternativa, asuma las funciones que ahora realiza el FMI y el Banco Mundial, tanto la concesión de préstamos para las políticas de desarrollo como el asesoramiento y la supervisión de las mismas. La constitución se hará mediante la aportación de 50.000 millones de dólares y una capacidad inicial de préstamo de entorno a los 100.000 millones de dólares. Y de momento usarán como moneda el dólar.

Crear esta institución supone, a mi entender, que empieza a surgir el mundo alternativo al escenario de mediados del siglo XX que aún rige las estructuras financieras y de poder a nivel global. Tras el final de la II Guerra Mundial se instaura un orden internacional determinado por los vencedores de aquella contienda, con una institución de control político, la ONU, en la que EEUU, Rusia, China, Francia y Reino Unido, los vencedores, tienen asiento permanente y derecho de veto en el Consejo de Seguridad, el órgano que toma decisiones y tiene poder más allá de las palabras. El resto de países o no cuentan u ocupan sillas en ese Consejo de manera rotatoria y temporal. En el plano financiero, las instituciones surgidas tras los acuerdos de Breton Woods, principalmente el FMI y el Banco Mundial, siguen siendo las teóricas garantes de la estabilidad global, aunque esto es más un deseo que una realidad. De esos acuerdos también surgió un mundo de tipos de cambio fijos referenciados al dólar, que actuaba como una especie de patrón oro con algo de volatilidad. Este sistema se fue al garete durante la presidencia de Nixon, en los años setenta, cuando se decretó la libre flotación del dólar y del resto de divisas, y se crearon los mercados de divisas que hoy son la piedra angular del sistema financiero internacional. Pese a ello el dólar sigue siendo la moneda de referencia para los intercambios comerciales, ciertas materias primas sólo se compran y venden en dólares (el petróleo sin ir más lejos) y la política económica norteamericana sigue siendo, por ello, la más importante y decisiva de todas. Visto desde nuestros días, esta estructura de poder ya no responde a la realidad en la que nos encontramos. El peso inmenso que posee en ella la Unión Europea no es para nada representativo de su actual semiinsignificancia en el concierto internacional, y países que en los años cincuenta o sesenta eran más bien poca cosa hoy son pesos pesados en el concierto internacional. Los citados BRICS, que es una expresión creada por un ejecutivo de Goldman Sachs en los noventa, para referirse a las piezas que construirían la nueva economía (en inglés bric quiere decir ladrillo) son una amalgama de superpotencias y países nuevos en el contexto internacional, con Rusia como potencia decadente del grupo y China como gigante en expansión, aparentemente, sin fin. Pero junto a ellos otros países adquieren cada vez más peso en el mundo y no tienen forma de significarlo en ese entramado institucional. Empezando por Japón, derrotado en la guerra, y que pese a su relativa decadencia sigue siendo una de las potencias económicas mundiales, pero que no puede votar ni vetar en casi ningún sitio. Otras naciones como Indonesia, Vietnam, Nigeria, Malaysia o Pakistán representan a cientos de millones de habitantes y economías que crecen a unas tasas de vértigo, y que hace apenas una década eran sinónimo de colonialismo decimonónico y poco más. Hoy representan un poder comercial y financiero creciente, y que demanda participar en el concierto internacional. Evidentemente, el sistema con el que nos dotamos en el pasado hace mucho tiempo que no da de sí, y este banco de los BRICS es la primera piedra que, lanzada contra él, es capaz de causarle daños serios.

Puede uno plantearse la gran pregunta de cómo será entonces el sistema que pueda sustituir al ahora existente. No lo se. Hace algunos años se empezó a hablar en serio de reformar la ONU, tratando de eliminar los restos del pasado y acogiendo parte de estas nuevas realidades, y se comentó la posibilidad de reformar los estatutos y el sistema de aportaciones al FMI en la misma línea de representar más fielmente la nueva realidad, pero de esos debates han surgido apenas algunas recomendaciones y casi ningún cambio relevante. A medida que pase el tiempo y no se produzcan reformas, el riesgo de que las viejas instituciones caigan en la irrelevancia es cada vez mayor. Muere un mundo viejo pero aún no sabemos cómo será el que está naciendo.

miércoles, julio 16, 2014

¿Cómo soportar lo insoportable?


A todos nos pone pruebas la vida, que a veces se comporta como un plácido paseo primaveral y en no pocas ocasiones se torna agreste como una ruta montañosa, llena de barrancos, agujeros y trechos por los que trepar para poder seguir. Es en esos momentos cuando más necesitamos la fuerza propia y la de los demás. Sabemos que tarde o temprano esos momentos llegan, por lo que tratamos de disfrutar el resto del tiempo y de, a veces sin ser conscientes, fortalecernos para cuando el reto se nos presentes. Sin embargo, cuando llegue el momento, nunca sabremos cómo vamos a reaccionar y sobrellevar el dolor.

Y eso en condiciones normales, en nuestras vidas que, en general, discurren sin sobresaltos, ajenas al desastre de la guerra, en las que la enfermedad o los accidentes son las formas naturales del mal que a todos se nos lleva. Sin embargo pueden suceder cosas mucho peores. Hace una semana se produjo la típica (usar esta palabra para referirse a un hecho así es repugnante, pero me temo que inevitable) matanza en EEUU, concretamente en los alrededores de Houston. Un hombre entró en una casa y disparó a matar, acabando con la vida de un matrimonio y cuatro de sus cinco hijos. El asesino era el exmarido de la hermana de la madre de los niños, y a por ella iba, pero al no encontrarla decidió matar allí mismo y a quienes se encontraban. Horrendo. Sólo hubo una superviviente, llamada Cassidy, de 15 años de edad, levemente herida, que conservó la sangre fría para, cuando el asesino huyó de la casa creyendo que todos estaban muertos, llamar a la policía y así permitir que fuera detenido en pocos instantes. Alrededor de Cassidy todo era muerte. El hogar en el que había vivido desde que nació había terminado, y sus padres y hermanos ya no eran sino cadáveres. Un espanto que, sinceramente, soy incapaz de imaginar. Pero no les quiero escribir para regodearme en el sufrimiento familiar y el morbo asociado, no, sino más bien por todo lo contrario. Ha causado sensación en EEUU, y no es para menos, la intervención de Cassidy en el funeral de su familia, en uno de esos actos colectivos de homenaje y despedida que tanto me gustan y echo de menos en nuestra cultura, en la que nos da vergüenza todo, incluso glosar la figura de un fallecido al que hemos admirado por su labor, obra o relación. Tras intervenir uno de los abuelos de las niñas, bastante joven en apariencia, sube Cassidy al estrado, con sus gafas grandes, pelo largo en coleta y, glups, radiante sonrisa. Y dice unas palabras emocionadas pero no entrecortadas, con una entereza apabullante, asombrosa, en las que recuerda a sus padres y hermanos, y les habla dirigiéndose a dónde ahora están, un lugar mucho mejor que este mundo, y dice a los presentes que la felicidad puede ser encontrada hasta en los momentos más oscuros, haciendo referencia a un pasaje del tercero de los libros de la serie de Harry Potter, el de Azkabán. Y con su mensaje y entereza Cassidy asombra a todos, enjuaga las lágrimas de los presentes y deja a los que leen la crónica y ven el vídeo, al menos a mi, en un profundo estado de congoja y asombro. Como antes he comentado no soy capaz de imaginar para nada el trauma que puede suponer el vivir una situación semejante, el sobrevivir a algo así, pero tengo serias dudas de que pudiera reaccionar con semejante aplomo y vitalidad. Si a veces la pena me embarga por cosas que me suceden en el día a día a que a muchos de ustedes les parecerían meras tonterías, seguro que me derrumbaba ante algo así. Pero Cassidy no se derrumba, se crece, y no deja que el dolor la venza, sino que ella gana al dolor. Es asombroso, es ilusionante, es admirable.

Leo en la crónica que toda la familia era de creencia mormona, y es muy probable que la fe que profesaba le haya permitido sobrellevar tanto dolor, pero creo que no es sólo la fe lo que empuja a Cassidy a seguir viviendo, sino una inmensa fuerza que reside en ella, probablemente fruto del amor y cariño que vivió durante su vida con sus padres y hermanos. Como en la historia de Harry Potter, fue ese amor que los demás proporcionaron al niño Harry lo que permitió que Voldemort no pudiera matarlo cuando era un bebé. Me dirá alguno que todo eso son novelas y que no sirven para nada ante la vida real, pero el amor y el cariño son reales, novelados o vividos, y Cassidy ha encontrado en ellos, me parece, la fuera para seguir viviendo y honrar a su familia con su ejemplo y sonrisa. Una historia que merece la pena ser contada.

martes, julio 15, 2014

Drones en la guerra de Gaza


Parece que se abre una puerta a la esperanza en la guerra de Gaza de este verano. Tras ocho días de bombardeos de Hamas sobre territorio israelí y de ataques del ejército hebreo sobre la franja, todos ellos con un desastroso balance de varios israelís heridos y casi dos centenares de palestinos muertos, Egipto trata de lograr un alto el fuego entre las partes, volviendo a ser el mediador en el que, al parecer, unos y otros confían. Parece ser que el cambio de dictador al frente del gobierno de El Cairo no ha afectado a esta relación de confianza mutua, lo que debe ser visto como algo curioso pero, desde luego, positivo. Ojalá la mediación tenga éxito.

Por de pronto, ayer se produjo un hecho curioso e importante, que marca un nuevo peldaño en la escalada hacia la guerra total que se vive en la zona. Inoperantes, detectados por el ejército israelí, y sin que parece que hayan causado daño alguno, Hamas enseñó a los medios de comunicación de todo el mundo los drones que posee, y que ya han sido empleados en ataques, de momento frustrados. Hasta ayer el único que utilizaba drones en la guerra local era Israel, dado que el otro bando ni siquiera los poseía, pero esto ha dejado de ser así, en medio de la sorpresa más o menos disimulada de todo el mundo, por lo que, si no me equivoco, esta guerra de 2014 es la primera en la que ambos contendientes usan drones como arma de ataque mutuo. Los drones son tecnología avanzada, que en el caso de Hamas es evidente que no ha sido desarrollada en la franja, sino suministrada por alguna potencia extranjera (¿Siria? ¿Irán? ¿Países del Golfo?) y que requiere no sólo la posesión del elemento volador, sino la infraestructura de seguimiento y el personal especializado que los maneja y transforma en armas. Los drones empezaron a ser utilizados en el campo de batalla por los EEUU en las guerras de Irak y Afganistán. Permiten una mayor precisión en los ataques, un coste muy bajo de los mismos, sean exitosos o no y, sobre todo, garantizan la seguridad del piloto porque, obviamente, esta figura no existe. Un drone puede ser manejado desde el campo de batalla o desde cualquier otra parte, y de hecho algunos de los que opera EEUU en la zona de oriente medio se controlan desde el propio territorio estadounidense, desde instalaciones en las que los “pilotos” realmente parecen adolescentes jugando a videojuegos que se desarrollan a miles de kilómetros de distancia, pero que acaban con vidas reales en vez de contar puntos cada vez que aciertan en su objetivo. La ventaja del uso de drones es obvia, por todo lo antes comentados, pero es que incluso los misiles clásicos palidecen ante la versatilidad de un arma que puede ser controlada en todo momento y que hace mucho más que apuntar a su objetivo. Los drones pueden llegar a jubilar en un futuro muy cercano a los sistemas de misiles y antimisiles, que en esta guerra de Gaza se están usando de manera intensiva por parte de Hamas e Israel (la cúpula de hierro que protege las ciudades hebreas). En una guerra futura, que empieza a estar ya aquí, los contendientes podrían librarla sentados tranquilamente frente a sus consolas mientras que aparatos voladores de tamaño y potencia de fuego muy diversa se enfrentan en el aire, bombardean o disparan objetivos, todo ello sin que se produzca ninguna víctima entre los ejércitos que los manipulan, dejando a los pilotos muy seguros y al borde del desempleo, mientras que el suelo sobre el que actúan los aparatos se siembre de víctimas civiles. El objetivo último de causar las mínimas bajas a las fuerzas militares propias se habría alcanzado, cero muertos, a cambio del sacrificio de la población civil, en lo que es una constante en la guerra moderna desde hace ya muchos años.

La popularización de estos aparatos en la vida civil, que empieza a darse en sus versiones de juguete, portátiles, pequeñas y manejables, utilizadas sobre todo para realizar grabaciones, muestra las enormes posibilidades de una tecnología que, como casi todas, se desarrolló inicialmente en el campo de batalla, pero que poco a poco se traslada al mundo civil, abriendo enormes expectativas y mercados. Quizás en unos años nuestras ciudades estén llenas de drones yendo de un lado para otro llevando paquetes, objetos o vaya usted a saber qué. Nos divertiremos con su uso y pensaremos en cómo pudimos vivir sin ellos en un momento dado. Y en ese futuro, sobre otro campo de batalla, también los drones seguirán disparando y matando.

lunes, julio 14, 2014

Empieza el liderazgo de Pedro Sánchez en el PSOE


Hoy hay una doble resaca que puedo compartir con ustedes. La personal, tras la extenuante aventura ciclista de este sábado, que me llevó a ascender a Navacerrada y provocar dolores en medio cuerpo que aún hoy los siento como el sábado veía las rampas de ascenso a la cumbre, y la del PSOE, que culminó ayer su experimento de elección democrática del Secretario General del partido, un proceso que ha culminado con éxito y dando una buena imagen a la formación, y metiendo presión a las restantes, especialmente al PP, para que cambien de una vez los caducos sistemas de elección “dedocrática” de sus figuras. En este campo el PSOE se apunta un tanto.

El ganador de ayer es Pedro Sánchez, a quien la mayoría daba como favorito, pero que logró casi la mitad de todos los votos emitidos, frente al 36% de los cosechados por Eduardo Madina, el derrotado de anoche, y el 15% de Pérez Tapias que, con ese resultado, se puede considerar muy satisfecho. Sánchez es un político de origen madrileño que hasta hace pocos meses apenas era conocido más allá de su agrupación de Tetuán y del Ayuntamiento, donde estuvo una legislatura entera. Ocupa escaño en el Congreso de los Diputados, pero no es de los asiduos en la Tribuna de Oradores, y posee un interesante perfil profesional ajeno a la política, lo que, como señaló ayer un comentarista político, le ha permitido cotizar a la Seguridad Social por su propio trabajo, cosa que sabemos es poco frecuente entre las figuras políticas de nuestro país. Sobre Sánchez recae ahora la enorme, hercúlea, tarea de reflotar un PSOE hundido en las encuestas y la desazón. Atacado por todos los flancos, desahuciado en Cataluña (donde ganó Madina) reducido su poder a su eterno feudo andaluz, y acusado aún por parte de la sociedad de ser el culpable de la crisis que nos asola, engendrada en los gobiernos de ZP, Sánchez supone el primer paso en el proceso de renovación real que el partido debía emprender para corregir su rumbo. En lo que hace a imagen y presencia, cumple las condiciones necesarias para ser una nueva figura. Joven, desconocido, apuesto, telegénico, de formas modernas, parece un político versado en los medios de comunicación, las nuevas tecnologías y la sociedad de internet en la que nos encontramos. Denominado por muchos como “el guapo” posee un innegable atractivo personal que, para que negarlo, siempre es un factor positivo en un político, que en el fondo desea ser gustado por la sociedad a la que se dirige. Sobre su propuesta política, lo importante, poco se sabe, salvo algunas vaguedades genéricas que siempre quedan bien pero que aún no ha traducido en ideas concretas. En su discurso de la victoria de ayer, que en esencia fue un mitin para los suyos, aludió a tres cosas que me llamaron la atención. Referencia obligada, y muy reiterada, a la unidad del partido, tras el proceso electoral, que siempre crea tensiones internas. Una frase a recordar, “somos socialistas, no nacionalistas” que describe muy bien el marasmo ideológico que, en parte, ha abducido en estos últimos años al PSOE y le ha desdibujado como alternativa, no sólo en las comunidades con fuerte presencia nacionalista, y una referencia a la victoria electoral en las elecciones del año que viene, municipales, autonómicas y generales. Es decir, un mensaje de aliento a su militancia, que va de derrota en derrota, y que ve como los rebeldes a su izquierda se los quieren merendar. En este sentido Sánchez empezó desde ayer a atacar a Podemos, creo que con acierto, señalando que el PSOE no es un mero partido de protesta, sino que debe ser un partido de propuestas y soluciones, porque volverá a gobernar España.

¿Cómo se interpretará la victoria de Sánchez desde el PP? Creo que si son listos lo verán desde dos ópticas muy claras. A corto plazo, en lo que queda de legislatura, es bueno, porque de entre todos los candidatos era Sánchez el más fiable de cara a poder pactar y dialogar de manera institucional. A medio, de cara a las elecciones de 2015, era el candidato más peligroso para el PP, porque es el que puede robarle votos de centro y decantar así una victoria para las filas socialistas. Desde hoy Génova vuelve a tener en Ferraz a un rival potencialmente peligroso, que aún debe demostrar mucho (casi todo, la verdad) pero que promete ser muy peligroso para las futuras aspiraciones de Rajoy. Esto se pone muy muy muy interesante.

viernes, julio 11, 2014

El Domingo, elecciones en el PSOE


Este próximo Domingo, creo que por primera vez en España, un partido político va a escoger a la jefatura de su estructura mediante primarias abiertas a sus militantes. Se trata del hoy en día vapuleado PSOE, y resulta ser un experimento novedoso, arriesgado y de potentes consecuencias posibles, no todas buenas. Presionado por sus bases, en una constante fuga de votos, asaetado por el PP y sintiéndose devorado por los populismos que tratan de comerle por la izquierda, el PSOE busca en estas primarias una manera de renovarse profundamente, de lavarse la cara delante de la sociedad para que ésta le vuelva a mirar no como un apestado, sino como alternativa.

Tres son los candidatos que concurren a esta carrera. Jose Antonio Pérez Tapias, el tercero en discordia, es un veterano de la corriente izquierda socialista, el ala más izquierdista del partido, que durante algunos años fue muy poderosa entre sus bases y que llevaba mucho tiempo languideciendo. Es el más veterano, el que más tiempo lleva en política, el más desconocido ante el público y el que enarbola un discurso más claro y mejor estructurado. Sus posibilidades de ganar son muy escasas, pero estas semanas de campaña, y especialmente el debate del pasado Lunes en Ferraz, le han sentado muy bien, y pueden darle la oportunidad de ser decisivo a la hora de determinar quién gane la contienda. En principio esa victoria se la juegan los dos candidatos principales, los jóvenes, Eduardo Madina y Pedro Sánchez, cuya principal característica y argumento es su edad y, en teoría, el desapego que ello les produce de la dirigencia que ha pilotado el partido durante décadas. Madina es, de los tres, el más conocido. Parlamentario desde hace varias legislaturas, víctima del terrorismo, superviviente de una bomba lapa que le amputó una pierna en sus años de concejal socialista en Barakaldo, si no recuerdo mal, lleva amagando con presentarse a primarias de lo que fuera desde hace mucho tiempo y, cuando se convocaron, lo suyo le costó apuntarse para disputarlas. Su discurso político es, a mi modo de ver, un misterio, porque no concreta nada. A los que me preguntan por él le respondo que me da la sensación de ser un ZP con gafas. Mucha seriedad en las afirmaciones, pero escaso contenido, mucha rigidez en los principios pero vacío de propuestas y ofertas. Le falta mucho recorrido para ser un líder nato, aunque puede llegar a serlo, y esta elección es para él mucho más importante de lo que se imaginaba, dado que si la pierde gran parte de su futura carrera política se irá al traste casi sin haber empezado. El otro candidato es Pedro Sánchez, otro desconocido para el público en general. Congresista desde hace poco, concejal en el Ayuntamiento de Madrid desde hace varios años, posee experiencia de gestión europea y es profesor de Economía en la Universidad Rey Juan Carlos. Acusado de ser el candidato del aparato, su campaña es la más moderna, estilo americano en muchos sentidos, basada en la imagen del candidato y, como en el caso de Madina, no en el contenido de sus propuestas, donde Sánchez es casi tan vacuo como el candidato vasco. Lo que más destacan de él los medios es su belleza personal, “el guapo” han llegado a apodarle, y es cierto que tiene una presencia e imagen de candidato mucho más fuerte de cara a una campaña telegénica. Vencedor en el recuento de avales, con casi una cuarta parte de todos los existentes, parece que se encamina a ganar estas elecciones, pero son muchos los que afirman que no está nada claro el resultado y que ahora mismo tanto Madina como Sánchez están empatados, y de ahí los clásicos nervios y navajazos. De ahí la importancia de los votos que pueda conseguir Pérez Tapias y lo que decida hacer con ellos.

En este estado de cosas, el experimento socialista del domingo va a ser visto con mucha atención por la clase política española, y esperemos que también por los militantes del PSOE, y que acudan en masa a votar. El PP va a encontrar cada vez más difícil defender su sistema “dedocrático” de elección de candidatos y cargos, que es de lo más impresentable que uno imaginarse pueda, y el PSOE, tras el resultado de las votaciones, requiere reinventarse como partido mucho más allá de la experiencia de primarias. Renovación de caras, sí, pero también de propuestas y de armazón ideológico. En inaudito que un partido de tradición y experiencia de gobierno esté asustado por unos antisistemas encoletados que quieren hacerse con su trono rosado. Así, estas elecciones no son el punto de llegada, sino el inicio del largo camino que debe afrontar el PSOE para reconstruirse tras los nefastos años de ZP y la crisis.

jueves, julio 10, 2014

El crowdfunding se nos va de las manos


De mientras discutimos sobre si la recuperación de la economía española es más o menos sostenible, nos endeudamos cada vez más y repartimos subvenciones que no controlamos (no supervisan ni los auditores, como para hacerlo los políticos) por ahí fuera el mundo económico vive una silenciosa pero intensa revolución que amenaza con poner patas arriba muchas normas y sectores que siempre se han considerado intocables. Internet y la tecnología basada en ella es el arma de batalla que amenaza con crear una nueva economía de verdad, no la que se nos anunciaba en el año 200 y se estrelló en la burbuja puntocom.

Taxistas enfurecidos, hosteleros asustados, compañías de autobuses con la mosca en la oreja.. las aplicaciones móviles y el uso compartido empiezan a ser sectores económicos con entidad propia, pero no es sólo eso, no. Uno puede revolucionar internet sin pretenderlo, al parecer la única condición para lograrlo es ser norteamericano, porque esto que les voy a contar se le ocurre a alguien de Albacete y sólo consigue una buena bronca de su madre. Nuestro protagonista, Zack Brown, quería hacer una ensalada de patata, sólo eso. Se dio de alta en kickstarter, una de las principales webs de crowdfunding del mundo y colgó en ella su perfil, su mensaje y la foto de un bol en el que se veía una especie de ensalada de patata (el aspecto culinario es la especialidad más débil de todos mis conocimientos en este asunto). Recordemos que estas webs sirven para que quien desee pueda hacer aportaciones económicas a los proyectos que en ellas se exponen, logrando así una financiación alternativa a la bancaria, basada en la voluntariedad de los donantes. Se solicita que cada uno aporte muy poco dinero y se trata de que la mayor cantidad de personas puedan ver el proyecto para recaudar lo necesario. Solicitaba colaboraciones de un dólar para comprar las patatas y algún otro ingrediente para hacer su plato. A alguno que pasaba por la web le resultó simpático el anuncio y decidió ayudarle al bueno de Zack, quizás porque cuando pulsaba tenía hambre y el bol le pareció jugoso y tentador. La cosa es que unos cuantos más pasaron por allí y dieron uno o más dólares, y la cuenta de Zak iba engordando poco a poco, pero sin duda a mayor velocidad que la de las calorías que le suministraba la ensalada. Su plan original era recaudar diez dólares, diez, en un mes, por lo que se supone que tenía dinero para comprar comida antes de que, transcurrido ese tiempo, se pegara el festín ensaladero. Sin embargo el bueno de Zack no podía imaginar que su proyecto e imagen iban a despertar el ansia de todos los amantes de las ensaladas de patata. Lo que empezó quizás como una broma, o un inocente juego, se ha ido convirtiendo poco a poco en uno de esos extraños y confusos episodios virales, que sólo pueden darse en EEUU, por lo visto, en los que todo se desmadra. El proyecto empezó el 2 de Julio y, transcurridos ocho días desde entonces, acumula una recaudación de, asómbrense, 43.592 dólares!!! Más de cinco mil personas han decidido financiar el proyecto de Zack, con cantidades individuales que, obviamente, superan el dólar de aportación en bastantes casos. La ensalada se ha convertido en un fenómeno en internet, hay páginas que hablan de ella y de la locura que ha generado, que debaten sobre si tiene sentido recaudar cantidades similares con ideas tan peregrinas, o si el mismo sistema del micromecenazgo, término complejo pero que se entiende bastante mejor que el inglés originario, ha llegado a un momento en el que se ha convertido en un sinsentido. No lo se, el debate está abierto, aunque yo soy de los que cree que uno puede hacer con su dinero lo que le plazca, y si decide donárselo a otro para que haga, por ejemplo, una ensalada, está en su derecho.

A todo esto no se muy bien que opinará Zack, que ve como su cuenta financiera engorda hasta dimensiones que le permitirían organizar una ensalada global en su Ohio natal, donde seguramente ya se habrá convertido en una celebridad. Analistas, estudiosos y demás expertos volverán a sentirse burlados por el complejo funcionamiento de esa simbiosis que hemos generado entre sociedad y tecnología, que tiende a volverse loca y funcionar a su aire pese a que deseemos encorsetarla. Y lo que también está claro es que si alguien quería un nuevo argumento para demostrar que la economía no es racional aquí tiene uno muy bueno, y seguramente aliñado.

miércoles, julio 09, 2014

Venganza sin fin en Oriente Próximo


La paz y la tranquilidad son esos momentos de publicidad que se dan los contendientes en oriente próximo para ir al baño, hacer sus necesidades y, reconfortados, volver para nuevamente enfrentarse sin fin, hasta que necesiten un nuevo respiro. Durante el día de ayer fue continuo el lanzamiento de cohetes desde la franja de Gaza contra las ciudades israelíes, incluyendo Jerusalén y Tel Aviv, y los bombardeos de la aviación israelí sobre la franja. La acumulación de tropas en la frontera indica que es más que probable un asalto militar por tierra por parte del ejército de Israel y la guerra no declarada crece en intensidad por momentos. Otra más a sumar a la interminable lista.

Es tan profunda la enemistad y desconfianza que existe entre los dos mundos que habitan aquella tierra que ha bastado un perverso, un cruel asesinato para que se vuelvan a disparar las hostilidades. Hace poco más de una semana que fueron encontrados los cadáveres de los tres adolescentes israelíes que llevaban secuestrados casi un mes, y que habían movilizado gran parte del ejército y la sociedad civil en su busca. Sus cadáveres, disparados, casi con toda seguridad el mismo día en el que fueron secuestrados, llevaban impresa la firma de Hamas o de algún movimiento islamista similar, pese a que la organización fundamentalista no se ha hecho responsable del acto. La conmoción en Israel fue grande, el dolor y la rabia inmensos, y si quien perpetro ese crimen buscaba generar una respuesta, hay que decir que lo logró. A los pocos días otro adolescente, esta vez palestino, era asesinado por, tal y como se ha descubierto a posteriori, un grupo de exaltados sionistas, que buscaban vengarse del crimen de los tres adolescentes. Buscaban una presa, y encontraron a un chaval que estaba en el peor lugar y en el peor momento posible. Lo secuestraron, golpearon y, según afirma la autopsia, quemaron vivo, en un acto vil que se equipara al que ejecutaron los asesinos de los tres chicos israelís. Cuatro muertos, cuatro personas jóvenes, inocentes, cuyo principal objetivo en el día en el que murieron era, sin duda, pasarlo bien y disfrutar algo de la vida, que a esa edad es infinita y se mantiene llena de sueños y esperanzas, incluso en una tierra tan torturada como aquella. Cuatro vidas segadas por el fanatismo, que necesita bañarse y alimentarse en sangre para poder existir. Cuatro personas sacrificadas en el altar de la venganza, en una escena de crueldad tan similar a las muchas que se relatan en el Antiguo Testamento que vuelve a demostrar que no hemos evolucionado mucho desde entonces, que el primitivismo que anida en todos nosotros siempre está a flor de piel, con ganas de surgir, y que a veces basta una chispa para que nos dejemos vencer por nuestros impulsos y actuemos sin freno para satisfacerlos. Si en todas las ocasiones que se han desatado enfrentamientos entre Israel y Palestina las causas han sido más o menos pueriles, esta es de esas en las que el motivo de la disputa es especialmente vil y cruel. Las familias de los cuatro muertos lloran por igual a sus hijos, los padres y madres, ante los cadáveres de sus jóvenes vástagos, rezarán a Yahveh o Alá, suplicando clemencia pero sólo sentirán dolor, y nada en el mundo podrá ofrecerles el consuelo que necesitan. Las mismas saladas lágrimas surgirán de sus vacíos ojos y correrán por sus mejillas, hasta caer en el árido y despiadado suelo de una tierra en la que la muerte y el odio es el único fruto que puede crecer en medio del erial. Odio regado con lágrimas de desesperación. Muerte como fruto de la eterna venganza sin fin.

EEUU ya tiene ante su mesa un nuevo intento de proceso de paz fracasado, otro más. La comunidad internacional vuelve a lanzar mensajes de calma y preocupación en medio de una indolencia y hartazgo cada vez más extendidos, los muertos de uno y otro bando crecen por cada día que pasa de incursiones, ataques y asaltos, y con ellos la lista de agravios y venganzas, que no cesa de aumentar, quizás hasta que, como pregona la escritura, no queden ojos ni dientes que arrancar, y la paz de los cementerios sea la que reine en esa tierra. ¿Ese es el futuro que queremos construir? ¿Cómo evitaremos que se produzca?

martes, julio 08, 2014

¿Sólo hay un culpable de la caída de Gowex? NO


Transcurridos más de dos días desde la caída de Gowex, producida tras la confesión de su presidente, Jenaro García, nadie, y repito, nadie, desde los numerosos estamentos oficiales y profesionales que se encargan de la supervisión del MAB y del sistema de bolsa español ha dicho aún nada. Si uno acude a la web de la CNMV verá que el último de los comunicados colgados es de fecha 2 de Julio en el que se acusa… a Gotham!!! Desde entonces, nada de nada. Ayer por la noche en Onda Cero fue entrevistada Elvira Rodríguez, presidenta de la citada CNMV, y no dijo nada más que vaguedades imprecisas, eludiendo responsabilidades en todo momento.

Lo que está sucediendo con Gowex me parece, salvando las distancias de la sorpresa derivada de una estafa desconocida por casi todos, a lo que pasó con Bankia. Cuando Bankia sale a bolsa muchos, en ese caso muchísimo, opinan que es una mala idea, que la entidad está hecha unos zorros y que su salida al mercado no es sino una fuga hacia adelante para tratar de evitar el, inevitable, colapso. Ante estos comentarios, los reguladores y el gobierno no dejan de acusar a los que así opinan de alarmistas, exagerados y antipatriotas (este término es muy común en España, país donde el patriotismo está completamente ausente). Bankia sale a bolsa, aguanta a duras penas y llega un día en el que el auditor, sospecho que harto ya de firma papeles vacíos de realidad y llenos de humo, se planta, el valor se derrumba y, oh sorpresa, se descubre que la entidad está quebrada. Su rescate, orquestado en un fin de semana, fue uno de esos momentos en los que todos podíamos habernos ido a la mierda, literalmente, si llega a salir mal, fue una situación de una gravedad extrema. Y pudo haberse evitado si se hubieran tomado antes las medidas que los “alarmistas, exagerados y antipatriotas” reclamaban. Tras el desastre, ¿quién fue culpable de lo sucedido? Nadie. Bankia se convirtió en una especie de fenómeno meteorológico que se abatió sobre España, como la granizada de la semana pasada sobre Madrid, y que no se podía esquivar. Obviamente ese argumento es falso, pero de tanto repetirlo a muchos les parece convincente, incluso real. Pues bien, con Gowex empieza a pasar algo parecido. Hay una diferencia sustancial, y es que el presidente de la compañía, Jenaro García, ha demostrado ser un trilero con menos morbo que “El lobo de Wall Street” pero con parecidas malas artes. Ha engañado a muchos clientes, empleados, instituciones y analistas, pero no a todos. Gotham, el analista norteamericano que destapó el tinglado, que lo hizo para ganar dinero con la jugada, merece nuestro reconocimiento, porque ha sido mejor que la policía a la hora de dar con este delincuente. Pero el resto de agentes encargados de que todo se desarrolle bien han fracasado. La CNMV trata de desvincularse del Mercado Alternativo Bursátil, el MAB, aunque no le faltó prisa para salir la semana pasada en defensa de Gowex y criticando a Gotham. Su papel en este entuerto es grande y su fracaso aún mayor. Sobre el auditor de la empresa, MA Auditores, y Ernest & Young, encargada de la colocación de la empresa en el MAB y lo que se denomina el “acompañamiento” de la misma, nada bueno se puede decir. O les han engañado como a chinos o, lo que es peor, se han dejado engañar. Tampoco se han pronunciado que yo sepa. Bolsas y Mercados españoles, la empresa que gestiona el IBEX y el MAB, ha emitido una escueta nota informativa en la que trata de salir al paso de la responsabilidad que le toca, que no es menor. Ayer su propia cotización en el IBEX sufrió un castigo d3%, por lo que, diga lo que diga, el mercado ya ha decretado su veredicto de culpabilidad.

Y el panorama que deja ese “fenómeno meteorológico” es devastador. Gowex destruida, con sus empleados al borde del paro. El MAB arrasado, con varias empresas tratando de salir de ahí y todas ellas sufriendo graves pérdidas ante lo que se interpreta como un mercado sin control ni supervisión ni seguridad alguna. La imagen del emprendedor, tocada por la actitud estafadora de uno de los más insignes y premiados. Y un montón de organismos, entes reguladores, altos cargos, supervisores y ejecutivos de altos sueldos tratando de eludir sus culpas y buscando que este escándalo no afecte ni a sus carreras ni remuneraciones. En definitiva, y con sus diferencias, una vergüenza similar a la vivida con Bankia. Desolador.

lunes, julio 07, 2014

El inmenso desastre de Gowex


La semana pasada pensé en escribir sobre lo que estaba pasando con Gowex, que me tenía bastante escamado, pero la actualidad meteorológica se impuso con toda su furia y violencia. Tras la suspensión de la cotización de la tecnológica, decretada el Jueves, supuse que las cosas estarían más tranquilas y lo iba a dejar para estos días, enfocándolo por el asunto de la influencia de las opiniones negativas, pero ayer estalló una bomba que lo cambió todo. El CEO de la compañía no sólo admitía que el negativo informe que inició todo era cierto, sino que las cuentas de Gowex eran falsas desde hace cuatro años. La empresa es un fraude. Pufff

Gowex es una empresa de origen y capital español especializada en la prestación de servicios y redes wifi. Su negocio consistía en proveer de conectividad wifi a espacios públicos, mediante contratos de patrocinio publicitario o institucional. Muy internacionalizada, su presencia en numerosos países y los contratos que allí ha ganado eran noticia un día sí y otro también. En España su logotipo aparece, por ejemplo, en todos los autobuses de la EMT de Madrid, y estaba casi adjudicado a su nombre el concurso para que fuera ella la que proveyera de red al metro de la capital. Era un caso de éxito de una start up nacional, de una empresa innovadora, de un grupo de emprendedores encabezados por Jenaro García, que tenían un aire a los chicos de Silicon Valley pero con raíces castizas, y que llevaron a Jenaro a foros, conferencias, premios y actos sociales en los que no dejaba de repetir el discurso del emprendedor triunfante en medio de la admiración y envidia de los presentes. Sacarse una foto con él se convirtió en objeto del deseo de políticos y autoridades de todos los colores e ideologías. Gowex era moderna, triunfante, exitosa, un modelo de la nueva economía y del futuro. La empresa cotizaba en el Mercado Alternativo Bursátil, MAB, una especie de IBEX para empresas emergentes, por simplificarlo mucho, y la acción no dejaba de crecer. Una historia brillante que empezó a descarrilar el martes pasado, no hace ni una semana. Ese día una empresa analista financiera de nombre cómico, Gotham Research, publicó un informe en el que se afirmaba que Gowex era la nueva Pescanova, que su modelo de negocio no funcionaba, que sus cuentas eran irreales, por falsas e infladas, y que el precio objetivo de la acción en el citado MAB era prácticamente cero. Esta información causó una convulsión en la bolsa española y en las acciones de Gowex, que ese día se dejaron algo menos de la mitad de su valor. El miércoles la cosa fue más leve, pero cayó otro 20% entre rumores y peticiones a la directiva de la empresa, cada vez más insistentes, para que hicieran algo para evitar lo que casi todos denominaban ataque especulativo y sin fundamento por parte de un analista buitre. El jueves BME, la empresa que gestiona el IBEX y el MAB suspendió la cotización de la tecnológica, que no dejaba de emitir comunicados en defensa propia, llenos de acusaciones ante los que no creían sus cifras, pero sin dato ni balance alguno. La semana acabó con la empresa muy herida en bolsa, su reputación puesta en entredicho y con la obligación de ser lo más transparente y clara posible para convencer a los accionistas y a todos los interesados de que esos informes acusadores eran falsos y que Gowex tenía todo el futuro por delante. Para algunos la empresa llevaba ya demasiado tiempo sin responder (en esto las horas son años, aprende Rajoy) y ofrecía una sensación de que algo había de cierto en esas acusaciones si no se refutaban de manera clara. La sensación de debilidad crecía entre los interesados y expertos, pero sospecho que muy pocos esperaban la bomba del Domingo por la mañana, sí, de ayer. Jenaro García admite que todas las cuentas de la empresa son falsas, lanza un tuit de disculpas y solicita el concurso de acreedores. Y en medio del marasmo, Gowex muere.

Si ayer la sensación era de incredulidad, hoy lo es de shock e indignación, y veremos a ver dentro de una hora escasa qué sensaciones ofrecen las empresas que cotizan en el MAB y el IBEX, golpeadas por un caso de fraude tan inmenso que ha dejado a todo el mundo sumido en la vergüenza. Regulador, auditor, analistas, periodistas, políticos, expertos, todos han fracasado a la hora de detectar irregularidades que, como mínimo, llevaban sucediendo desde hace cuatro años, sino más. Nuevamente ha tenido que ser un analista internacional, ajeno a nuestras miserias y conchabeos, el que destape nuestras vergüenzas y nos diga claramente lo que es cierto y lo que es falso. En fin, una triste historia de fraude y engaño que dejará mucho dolor en todo su recorrido.

viernes, julio 04, 2014

Granizo en Madrid


Qué cosas tiene la vida, si ayer les comentaba que estábamos viviendo un acusado episodio de tormentas, y me hacía eco de sus impactos en distintas localidades españolas, por la tarde tuve la oportunidad de sentir “los impactos” muy cerca de mi, concretamente al otro lado de las ventanas de la oficina en la que trabajo, donde los granizos, del tamaño de canicas grandes, empezaron a golpear el edificio y toda la zona urbana en la que se encuentra con una violencia y e intensidad como pocas veces he visto en mi vida. Hace varios años viví algo parecido de madrugada en el barrio donde resido en Madrid, pero es el único episodio semejante al que puedo acudir.

A lo largo de todo el día de ayer Madrid estuvo rodeado de tormentas que, tímidamente, se adentraban a la ciudad. Principalmente afectaban las zonas este y sur de la ciudad, y desde el trabajo (estoy en la parte alta de una de las torres de la Castellana y tengo unas vistas privilegiadas de toda la urbe) veía como el corredor del Henares era azotado una y otra vez por nubes negras, muy desarrolladas, que dejaban cortinas de lluvia de gran intensidad, acompañadas de rayos que se oían perfectamente desde nuestra ubicación. Fueron varios los chubascos que llegaron a regar la ciudad, de manera brusca y por poco tiempo, dejando una estampa de día tropical porque, a pesar de la lluvia, la temperatura seguía estando claramente por encima de los veinte grados. Las imágenes de radar de AEMET mostraban montones de puntos bien formados, tormentas que evolucionaban y desplazaban de manera caótica e irregular por todo el centro del país, y que según podía leer en la web ya habían provocado inundaciones en Talavera de la Reina y algunos problemas en Toledo ciudad. Bajé a comer a la hora acostumbrada y subí sin sobresaltos, y volví a realizar un examen visual desde la planta de cómo estaba el cielo. Y otra vez una enorme tormenta descargaba con ganas en el este de la ciudad, justo en el límite con la zona del aeropuerto de Barajas, que ya no podía distinguir por las cortinas de precipitación. Sobre la lluvia, un “arcus” perfecto, negro y amenazador, desarrollaba su forma de ataque en lo que era una formación de tormenta de libro, cuyas estructuras no podía distinguir con claridad dada la cercanía de la misma a mi posición. Abrí la ventana y sentí que el viento era cada vez más intenso, y que me golpeaba de cara… aquella enorme tormenta se dirigía hacia donde yo estaba, hacia Madrid. Y cada vez el área visual que podía distinguir desde mi posición se reducía, porque era cubierta por una masa blanquecina de agua que lo tapaba todo. A una velocidad creciente las nubes y las cortinas se acercaban hacia mi edificio, y no pasaron más de cinco minutos desde que fui consciente de que venían hasta que lograron llegar. El ruido del viento se convirtió en una escandalera feroz, y a medida que ráfagas de lluvia empezaron a caer con gran fuerza sobre la Castellana como si arrojadas desde una ducha se tratasen, los granizos empezaron a golpearlo todo. Primero se intuían, pero luego se abrieron las puertas del cielo y, como si se tratase de la ruptura del bombo de la lotería de Navidad, millones de bolas empezaron a caer sobre el suelo, cristales, azoteas, árboles, coches, asfalto y todo lo que uno imaginarse pueda. El estruendo era enorme, insoportable, un ruido espantoso, en el que los truenos eran apenas distinguibles entre los miles de impactos que simulaban ser un ametrallamiento de la ciudad. Los carriles del Paseo y calles aledañas empezaron a cubrirse de blanco y verde, fruto de las ramas y hojas que el granizo arrancaba a su paso. Los coches se fueron deteniendo poco a poco y la ciudad se paró, absorta, asombrada y asustada, por la descarga de una tormenta que en apenas diez minutos generó un caos absoluto en todas partes.

Tras el paso de la nube se hizo la calma, sobre todo el silencio una vez que los granizos dejaron de golpear, y empezó el proceso de recuento de daños, de asombros, de tuits y whatsapp desatados entre todos los que habíamos vivido aquel episodio, afortunadamente a resguardo, y las noticias sobre carreteras afectadas, inundaciones, cortes de servicio de metro y de otras infraestructuras… la tarde de ayer en Madrid fue bastante caótica en los barrios más afectados, que aún hoy harán recuento de daños, y al final de la jornada la ciudad olía, como en el campo, a hierba cortada, fruto de las hojas y ramas de los árboles que, violentamente arrancadas, tapizaban los suelos, quedando como únicas pruebas de la violencia que se había desatado pocas horas antes.

jueves, julio 03, 2014

Otoño en Julio


Estaba pensando titular el artículo de hoy en plan “otoño en Madrid” para hacer un guiño a la sensiblera película dedicada a la ciudad de Nueva York, que luce en ella mucho mejor que la pareja de actores que interpretan su papel, pero ni Madrid es Manhattan (ojalá, pero no es el caso) y la situación de inestabilidad que vivimos no afecta sólo a la capital, sino a gran parte del interior del país, sometido desde hace un par de días a fuertes tormentas que, afortunadamente, no han dejado heridos ni víctimas, pero sí daños materiales e imágenes impropias de la época, estampas de una granizada y blanca Navidad en Julio.

El clima es tozudo y el tiempo es caprichoso, por lo que regresiones de este tipo no debieran de extrañarnos. Si recuerdan tuvimos un Mayo de temperaturas muy altas, impropias de la época, que esta semana hubieran sido normales. En aquellos días pocos dijeron algo o se quejaron. La mayoría se lanzó a ocupar las terrazas y a disfrutar de unas noches en las que el calor animaba a estar fuera de casa. Junio, el mes con más luz del año, empezó igual de cálido, pero a medida que avanzaba se fue tornando inestable, con episodios de tormenta que fueron mucho más allá de lo que suele ser habitual, y se alejaron de las zonas tradicionales de formación, sistemas montañosos y, especialmente, el entorno de la Ibérica, la zona más tormentosa de España. El día de la proclamación de Felipe VI la mañana fue radiante y soleada, pero la tarde noche se convirtió en intensa tormenta, lo que me hace sospechar que cada acto social de importancia en la vida de este hombre se acompaña de un buen aguacero y rayos. Desde entonces, con alternancias, las tormentas llevan presentes en nuestro país de una manera u otra sin interrupción, siendo más frecuentes en el entorno de la Ibérica y los Pirineos, pero con episodios violentos que se han desatado en La Rioja, Navarra, Murcia y muchas otras regiones. Las temperaturas, en parte debido a esta inestabilidad, no acaban de remontar, y “la calor” del verano aún no se ha presentado, cosa que la mayor parte de la población agradece. Supongo que los encargados de las piscinas, chiringuitos y refrescos empezarán a estar un poco mosqueados, porque sin que le termómetro supere claramente la barrera de los 30 grados su actividad no despierta del todo, y de momento no se aprecia esa estabilidad típica de la época que convierta a las piscinas municipales en charcos atestados de bañistas buscando consuelo ante el calor que no pueden aguantar fuera de ellas. ¿Es todo esto normal? Sí. Un año puede salir más o menos lluvioso, más o menos cálido, con más o menos tormentas, pero en todo caso hay que esperar a tener los registros de los episodios que estamos viviendo para determinar si son anormales o no. Es probable que en determinadas localidades lo sean, y que alguna tormenta haya batido records en cuanto a intensidad de lluvia, granizo o rayos, pero debemos recordar que son fenómenos localizados, circunscritos a un lugar muy concreto, y por tanto su influencia sobre las medias generales de precipitación y temperatura serán escasas. Ya llegarán los días de calor en los que parece que el mundo se detiene, y sólo se escuchan a algunos insectos, como las chicharras, emitir su continuo y aburrido ronroneo, y tumbados en el sofá o trabajando en la oficina, digamos un montón de veces eso de “qué calor”, y hablando con los compañeros nos quejemos de la temperatura que hace y de cómo este año no ha habido primavera ni apenas tormentas, y claro, con este calor no se puede, y que si el calentamiento global se nota mucho en mi barrio, y muchas otras cosas así, carentes casi siempre de razón y sentido, pero que son socorridas para animar la conversación y sobrellevar el calor del verano.

De momento hoy no pasaremos mucho calor, y con un poco de suerte podremos ver tormentas cerca de donde vivimos o trabajamos. Si le gustan, como es mi caso, o las aborrece o no le importan, podrá disfrutar con ellas en todo caso, porque a la tormenta le da igual si la admiran o detestan (viene a ser como un imputado, indiferente ante su entorno). No sea inconsciente, use el sentido común, y no se exponga a ser alcanzado por un rayo, una ventolera o una posible crecida de un arroyo en caso de intensa precipitación. El espectáculo de una tormenta desatada es difícil de superar (quizá sólo sea comparable al efecto “tormentoso” que genera en el amante la cariñosa mirada de la mujer bella y amada) pero, como en el caso de la comparación, tenga precauciones, que nunca están de más.

miércoles, julio 02, 2014

El pasado persigue a Sarkozy y a Francia


Una de las maneras más cutres, pero sin duda efectivas, de consolarse de la desgracia propia es regodearse en la ajena. Se sabe uno deshecho, acabado y mal, pero ve como su vecino sufre o maldice y automáticamente una sonrisilla malévola se asoma por el rictus, con un pensamiento que empieza a minusvalorar el drama personal, y se cachondea del atribulado compañero. Lo hacemos todos, no lo neguemos, una o muchas veces, y sabemos que no soluciona nada, pero es una vía de escape socorrida. También los países pueden llegar a tener estas tentaciones. “Sí, estamos mal, pero mira como están en Xlandia” como si eso arreglase los problemas locales, y pese a ello se es una frase que se repite muy a menudo.

Usando esta artimaña tan barata, para encontrar consuelo de la desastrosa situación política en España basta con cruzar la frontera y asomarse a Francia, para encontrarse con un panorama aún más endiablado si cabe. Preside la republica el socialista Hollande, uno de los políticos más decepcionantes, grises y vacíos que se han visto en mucho tiempo, que ganó las elecciones con amplia mayoría enarbolando la bandera del ciudadano normal y corriente, y que ahora apenas aprueban en su gestión una quinta parte del electorado. Frente a él la derecha clásica, fundada en torno al partido UMP, el equivalente a nuestro PP, se desangra en luchas partidistas entre distintos candidatos que se presentan a elecciones que no hacen sino perder una tras otra. En este panorama surge una duda obvia. Si al PS no le vota mucha gente y la derecha pierde, quién gana las elecciones? Pues nada más y nada menos que Marine Le Pen, dueña y señora de un Frente Nacional de extrema derecha, que ha dulcificado en parte y modernizado tanto en planteamientos como en estrategia, pero que es lo que ha sido siempre, un partido ultra, xenófobo y antisistema. Ese es el deprimente panorama que reina en la política francesa, comparado con el cual España es un bálsamo de estabilidad y sentido común. Algunos analistas veían en Sarkozy, el expresidente que fue derrotado por el hombre normal Hollande, como la esperanza de un centro derecha moderado, que unificase las familias ahora enfrentadas, y que pudiera robar votos a Le Pen y a algunos socialistas descontentos para así auparse nuevamente al Eliseo y aportar estabilidad a Francia. Esa teoría no es descabellada, pese a que personalmente la figura de “Sarko” no es de mis preferidas. Debo reconocerle el papel que jugó durante su presidencia en el hostigamiento a ETA y en la colaboración en este asunto con los gobiernos españoles, pero en conjunto me pareció una figura decepcionante como Presidente, en un sentido muy distinto al de Hollande, pero también un bluf. Obsesionado por la imagen, hiperactivo con tal de conseguir salir en la foto, aunque fuera haciendo tonterías, con un tono de prepotencia ridícula, Sarkozy dilapidó gran parte de su capital político en turbios escándalos y actuaciones de cara a Europa y resto del mundo en las que se creía un nuevo Napoleón, mientras que todos le miraban con sorna y, con disimulo, se reían a sus espaldas. Su divorcio con Cecilia y posterior matrimonio con Carla Bruni dio mucho que hablar, aunque no tanto como el uso de alzas para levantarse del suelo y la prohibición de los tacones a su esbelta y nueva esposa. En este sentido, quién lo diría, Sarkozy ha resultado ser un pipiolo en comparación a la fogosidad del “normal” Hollande, que debe transformarse en la cama en una fiera insaciable, visto su éxito entre el público femenino.

Desde ayer, esas teorías que insistían en la posible, incluso necesaria, vuelta de Sarkozy, se han topado con un grave problema, y es que el turbio pasado vuelve con intención de cobrarse facturas atrasadas en la persona de Nicolás. Tras una detención e interrogatorio que llevó todo el día de ayer, Sarkozy está imputado por un montón de delitos relacionados con prácticas corruptas de financiación de su partido y las campañas electorales (vamos, lo de siempre) y su carrera política podría terminarse del todo si alguna de esas acusaciones se sustancia en una condena. Me queda el morbillo de pensar, si llegara el caso, cómo serían los “bis a bis” de Bruni y Sarko, y hasta qué punto llegarían en la escala Hollande de la pasión…. Sí, sí, siempre nos quedará París.

martes, julio 01, 2014

Todo lo que tengo es tuyo (Para IGU y NEP)


Este sábado por la tarde, como estaba previsto, tuvo lugar en Durango la esperada boda entre mi amigo IGU y su amada NEP, en el convento de San Francisco, bajo un intenso chubasco de verano que empezó algo antes de la hora señalada para el evento y terminó bastante después, y que pese a que deslució en parte los prolegómenos y conclusiones, habrá que recordarlo como metáfora de la felicidad que los novios desprendían y como fuente agua viva que riega las flores, que adornaban el atar, y el amor que la pareja se profesa. También podía interpretarse como lluvia molesta que empapaba, pero será mejor verlo desde una perspectiva optimista. Además, todo transcurrió de manera óptima, por lo que, bienvenida lluvia.

Todas las ceremonias de boda tienen sus particularidades. En este caso quiero quedarme con un detalle novedoso que no he visto en ocasiones anteriores. En el momento de entregarse las arras, esas monedas que son signo de los bienes materiales que los novios van a compartir una vez casados, IGU y NEP se intercambiaron objetos mundanos, de la vida diaria, y posesiones de gran valor que daban un nuevo significado a ese gesto. Si no recuerdo mal se dieron mutuamente una fotografía de sus familias, que desde el sábado son parte de la vida de ambos, de sus amigos respectivos, que también son ya amigos de ellos dos, un cuaderno en el que cada uno había ido recogiendo sus experiencias de convivencia y fe, en los encuentros y formación que han tenido a lo largo de estos años, juntos, por separado o como monitores de religión y tiempo libre, las libretas del banco y las llaves de los pisos respectivos (y sí, IGU, la del coche). Primero NEP y luego IGU, cada uno sostenía una caja decorada de la que iba extrayendo los objetos y se los entregaba al otro, delante de todos nosotros. Esa entrega era una metáfora de la cesión de la vida material, que a veces queda un poco oculta entre el ceremonial del matrimonio, y que en este caso fue resaltada especialmente, cosa que me gustó. Y es que en la vida en pareja, en común, además del amor y los sueños y las fantasías, existen los desayunos, la hipoteca, la compra en el súper, las derramas de la comunidad de vecinos, las facturas de la luz (esas sobre todo) y un montón de gastos y cuestiones bastante prosaicas, de las que a casi nadie le gusta hablar, pero que son muy necesarias no sólo para que la vida funciones, sino para que ese amor en común pueda germinar. Las estrecheces de la vida, y más en épocas de crisis como las que vivimos, suponen un enorme reto para las parejas que, tengan hijos o no, se enfrentan a enormes dilemas cuando los ingresos no llegan y los gastos no frenan. El día a día se puede convertir en una carrera de obstáculos para poder llegar, desfondados, a la fecha del nuevo cobro, en la que se encontrará un oasis temporal en el que saciarse y coger fuerzas para una nueva carrera hasta la nueva meta. Detalles, regalos, caprichos, quedan muchas veces aparcados por la necesidad de lo urgente, y esa tensión acumulada puede generar una tristeza que mine el amor. En otras ocasiones lo que falta es justo lo contrario, desprendimiento y generosidad. Se centra la vida en torno a lo que se posee, lo que se tiene, lo que es mío y es tuyo, algo muy común en nuestras sociedades, cosificadas y egoístas en demasiadas ocasiones, y esa es otra cuña que puede fracturar el árbol del amor en miles de afiladas y peligrosas astillas Por ello se debe tener en cuenta que el matrimonio, la pareja, es también una vida de cosas en común, que es menos importante que la relación en sí, pero que tampoco se puede despreciar como algo baladí o carente de sentido.

A lo largo de su tiempo de noviazgo, y de los años de vida que nos han permitido compartir, IGU y NEP han dado muestra de que su amor es grande y noble, pero sobre todo de que son generosos hasta el extremo, para ellos mismos y para los que los rodean. El término “mi” como posesivo apenas ha salido en sus labios ni existido en su corazón. Esos bienes que se entregaron delante de todos hace mucho que los comparten, y por ello son ricos, no por lo que poseen, sino por valorar lo que tienen y hacer muestra de desprendimiento. No tengo dudas de que ambos serán felices, y en su caso lo serían teniendo muchas o pocas cosas, porque tienen clara cuál es la fuente de la felicidad, cual la causa de su amor, y de dónde nace la lluvia que les riega desde hace tanto tiempo y que les ha permitido florecer como lo han hecho.