martes, septiembre 13, 2011

Francia está llena de centrales nucleares (para JIA)

Como no es bueno que las desgracias vengan solas, ayer lo hicieron a pares. Al nuevo paso dado por la economía europea hacia su derrumbe se sumó la explosión acaecida en un reactor nuclear francés, que luego se transformó en incendio en un almacén de residuos. Lo que al principio fue un susto enorme se fue diluyendo poco a poco en un incidente que no ha generado radioactividad, sí un muerto y cuatro heridos, y nuevas dudas sobe el futuro de la tecnología nuclear como fuente de energía. Y eso a seis meses y un día de Fukushima.

Lo que más asustó del asunto francés es que está aquí al lado. La planta afectada se encuentra a unos doscientos kilómetros de la frontera española, lo que demuestra lo paleta que es la decisión de un país de no construir reactores, renunciando a esa fuente de energía y ese impulso tecnológico, de mientras sus vecinos sí lo hacen, porque si todo va bien el que hace el reactor sale ganando (inversión en I+D+i y empleo) y si todo va mal, en caso de accidente, todos salimos perdiendo, construyamos el reactor o no. El caso francés es paradigmático. En Francia funcionan más de cincuenta reactores nucleares que proporcionan el 80% de la electricidad consumida en el país. De hecho es la nación más nuclearizada del mundo. Es una apuesta estratégica que ese país ha desarrollado desde hace años, lo que ha llevado a
Areva, el consorcio público privado que construye las centrales francesas, a ser uno de los principales inversores, desarrolladores y vendedores de tecnología nuclear en todo el mundo. Es por tanto, un sector estratégico para Francia, como puede serlo para España el turismo. Pongamos en frente el caso español. Con nuestros ocho reactores operativos, que producen el 20% de la electricidad consumida, España tiene en la energía nuclear una fuente más de suministro, pero no es ni mucho menos la determinante. Si uno accede a la web de Red Eléctrica en la que se muestra el consumo y la producción de la electricidad en cada momento verá que el peso de las fuentes es variado, siendo los ciclos combinados de gas la principal fuente común de abastecimiento, dependiendo la producción eólica del viento, que en días como estos es muy escaso, y teniendo una notable presencia el carbón, que también oscila mucho en función del comportamiento eólico. Lo que siempre está en el mix, que así se denomina esta mezcla de orígenes, es la energía nuclear, que no se apaga nunca, siendo su peso relativo más importante de noche y cuando el aporte renovable disminuye. Por lo tanto vemos que España necesita la energía nuclear pero no depende de ella, mientras que Francia no puede existir sin sus reactores. ¿Es factible, por tanto, alcanzar el sueño ecologista de renunciar a la energía nuclear? Quizás países como España puedan planteárselo a medio y largo plazo, teniendo en cuenta en todo caso que lo que se produce vía reactor se debe producir por otra vía fiable y segura, y a día de hoy eso implica el uso de energía fósil importada emisora de CO2. Si la demanda se mantiene estable muchos años (poco probable con el sueño del coche eléctrico en la mente de muchos) y la tecnología de producción renovable mejora mucho, quizás en años eso pueda llegar a ser posible, aunque se me antoja ilusorio, pero es obvio que Francia, y otras naciones intensivas en centrales nucleares, no pueden plantearse en un escenario de pocos años el cambiar de modelo de generación eléctrica. Simplemente sus costes serían infinitos.

Así, el incidente francés vuelve a ponernos sobre la mesa el complejo problema que supone obtener un suministro seguro, continuado y ecológico de energía. A día de hoy es imposible resolver esta ecuación, para un país moderno, cumpliendo las tres premisas porque, simplificando mucho, la nuclear es continuada y ecológica, pero no es segura, las fuentes derivadas del petróleo son seguras y continuadas, pero no ecológicas, y las renovables son ecológicas y seguras, pero no continuadas. ¿Cómo resolver este dilema? De las respuestas que obtengamos dependerá nuestro futuro en gran medida, dependientes como somos en grado sumo de la electricidad.

2 comentarios:

MMO dijo...

Lo de ayer NO fue un accidente nuclear. NO.

Fue un accidente industrial y punto.

No mezclemos churras con merinas

Saludos

MMO dijo...

Por ejemplo, leer esto:

http://noticias.lainformacion.com/ciencia-y-tecnologia/ciencias-general/historia-de-un-fail-nuclear-cuatro-errores-informativos-sobre-el-accidente-de-marcoule_UBQuMX2PxWxFJWJ6kaAPf3/

Resumo:

1. Marcoule ya no es una "central nuclear".

2. El accidente no ocurrió dentro de la antigua central de Marcoule

3. No hubo "explosión nuclear"

4. No hubo fuga radiactiva: se trata de residuos de "baja intensidad".

Saludos