No se si les he dicho alguna vez que tengo una amiga que trabaja en la late, aunque dado como está el patio de la pequeña pantalla a lo mejor no es algo de lo que uno pueda presumir. Enchufamos el aparato y casi todo lo que vemos es cotilleo, teleralidad, vacuos concursos en busca de la fama y el éxito, y demás basura, eso sí, envuelta en un precioso y cuidado celofán. Sin embargo, mi amiga, que es lista e íntegra, nunca se dejaría envolver en ese tejido absorbente de ideas, y se dedica a la televisión seria, a las noticias.
Y es curioso, pero no le había visto nunca en directo hasta........ ayer. Creo que lleva más de dos años en antena y ayer, Lunes 7, fue la primera vez que la ví, y todo gracias a que, tras el pertinente aviso de la comunidad notificando que ya se ha hecho la obra, he instalado el decodificador de la TDT en mi casa y ya puedo ver la tele en digital, y es que mi amiga trabaja dando la campanada en un canal de actualidad económica sólo disponible en TDT. Pasadas las 15:00 estaba tumbado en mi sofá, cómodo a más no poder, apreciando que bien lo hace Ana Blanco en el TD1, pase de canal.... y allí estaba ABG!!!. La verdad es que durante unos minutos no podía evitar una extraña mezcla de emoción y rareza. A esa chica la conozco desde hace años, en situaciones muy distintas, y nunca me la hubiese imaginado haciendo televisión, viéndola de manera pública.... una sensación muy rara. Y además empecé a intranquilizarme, porque me sentía como el amigo de toda la vida, la madre (bueno, en este caso el padre) que ve a su hija orgullosa en un estadio de fútbol, o, mejor aún, en los mundiales de atletismo, y empieza a vitorearle cuando se da el pistoletazo de salida, y le sigue con la vista clavada en sus zapatillas, apreciando cada zancada, cada gesto. Es la gran final, y su pupila tiene la medalla en la mano. Sufre por cada gesto de dolor que emana de su rostro, por cada codazo que recibe en la curva, y en la recta final se emociona, se levanta y grita desaforado su nombre, acompañado de los recuerdos de toda una vida, que se agolpan en ese instante en el que su hija gana la carrera, se enfunda su rostro en lágrimas de alegría y ve culminada una carrera, una dedicación, una vida. Sin tanto dramatismo, pero con una tensión similar, veía yo el programa analizando cada gesto de ABG, sus errores, sus aciertos, haciéndolos todos míos, y sintiendo que, en cierto modo, era yo también el que estaba allí, en el plató, el que corría esa carrera, el que se la estaba jugando....
............ y ganando, porque (acepto que no es un juicio muy objetivo) mi amiga lo hace de maravilla. Seria, rigurosa, profesional, amena, sabiendo mirar a la cámara, declamando limpia, cadenciosa y alegremente, logra transmitir la noticia sin agobios ni presiones, y el espectador se siente a gusto con esa voz y esa pose tan natural, y que tanto estudio y trabajo tiene por detrás. No se si está bien que lo diga, pero ayer cuando acabó el programa me sentí orgulloso, me colgué parte de la cadena, y me entró el vértigo al pensar en el futuro que le espera, porque en la tierra de las oportunidades, a donde se va en breve, puede llegar hasta donde quiera, a alcanzar el triunfo verdadero..... y seguirá siendo tal como es, y seguirá siendo mi amiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario