jueves, mayo 22, 2008

130$ y subiendo

Una cosa es que te lo cuenten y otra verlo. Estaba ayer por la tarde hablando por teléfono con una amiga mía mientras cenaba algo y veía la tele (condenada capacidad de hacer varias cosas a la vez) cuando salió rotulada la cotización instantánea del petróleo, marcando en aquel momento, las 20:50 más o menos, los 133 dólares, tanto para el Brent europeo como el West Texas americano. Se me escapó una especie de “OH, no!!!” o “vaya mierda” que encima venía a cuento de lo que mi amiga me decía, pero durante unos instantes sólo veía barriles volando pro los cielos, y cada vez más altos

Hace pocos meses franqueamos la histórica barrera de los 100$, pero eso se ha quedado como mera anécdota en un camino imparable hacia nadie sabe donde. ¿Por qué está disparado el petróleo? ¿hasta cuando va a seguir así? ¿Es una corriente especulativa, que esta formando una gran burbuja, y que en un momento dado se desinflará? ¿O estamos ante un escenario duradero, sólido, de precios sostenidos durante varios años? Enormes preguntas, de difícil respuesta. Pero sólo muestran una cara del problema. Hay otra batería de preguntas que tratan de saber qué consecuencias tiene un precio así en nuestro sistema económico, productivo y social, en el que el petróleo es una especie de piedra angular sobre la que basamos todo. La sangre que corre por las venas de la economía se está convirtiendo en un problema. En vez de llevar oxígeno y rentabilidad transporta inflación y crisis. ¿Vamos a ser víctimas de una especie de “leucemia petrolífera? Si acudimos a los expertos, ayer
Mcoy señalaba algunas causas y efectos de esta subida. De entre ellos, todos importantes, y alguno más habrá, me quedo hoy para reflexionar con el trasvase (sí, es palabra tabú, pero viene al pelo) del dinero. Cuando llenamos el depósito del coche, o nos compramos una piruleta envuelta en plástico, estamos trasvasando dinero, recursos y riqueza a los productores de petróleo, muchos de ellos regímenes inestables, corruptos, o directamente satrapías delincuentes. A un precio de 100$ esos recursos son fabulosos, capaces de sacar de la pobreza y atraso a cualquier sociedad, pero más habitualmente se destinan a fines más oscuros. La compra de armamento, el diseño y creación de nuevas armas, incluso nucleares, el desarrollo de estados policiales o de regímenes populistas parecen ser los caminos por los que transitan, sin muchos reparos, naciones como Arabia Saudí, Irán, Rusia o Venezuela, y cuanto más caro sea el barril mayores recursos destinarán a esos fines, y, qué contrariedad, más se lo pagaremos el resto del mundo. Y con unas arcas llenas, una moral elevada y una sensación de poder basada en hechos más reales cuanto más suba el barril, más difícil será que los opositores rusos puedan manifestarse libremente por Moscú o que la libertad llegue a arraigar por las calles de un Teherán sometido a una dictadura moralista y retrograda como pocas.

Sin embargo, es tal el flujo de dinero que llega a los países productores que da para todo, incluso para la fantasía. Esta semana el Burj Dubai ha alcanzado los 650 metro sobre las ardientes arenas de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), y se ha convertido en la mayor estructura jamás construida por el hombre.
Viendo algunas fotos aéreas de la semana pasada uno tiene la sensación de que esa fantasía, y lo que le rodea, es todo irreal, pura imaginación, pero parece que es cierto. EAU ya obtiene más dinero del turismo que del petróleo, pero esas formas que se disparan en las arenas están alimentadas por barriles, y veremos si acaban siendo el parque de atracciones de millonarios, que es a lo que aspiran, o simples recuerdos abandonados de una época de orgía bañada en dólares.

1 comentario:

MMO dijo...

No sabía que ya tienes "tele" en casa. Aún te hacía escuchando atentamente el aparato de radio, sintonizando manualmente las 3-4 emisoras que te gustan...

En fin, ya puedes horrorizarte con la "telebasura" como todos.

Saludos