Ayer se desató un incendio en la sede de la Filarmónica de Berlín. Al parecer, por motivo de una soldadura, llamas y negro humo asomó visiblemente por encima del moderno tejado de la sala de conciertos, que al parecer no ha sufrido daños estructurales. Considerada como uno de los edificios con una acústica más portentosa, y sede de la orquesta más importante del mundo, la sede de la Filarmónica actual sustituye al edificio histórico, destruido durante al Segunda Guerra Mundial, y fue inaugurado por la orquesta en los años sesenta, de la mano del gran Karajan, de quien se cumple este año el centenario de su nacimiento.
Malas noticias para la música. Podía arder la academia de Operación Triunfo, o la sede de la SGAE, pero no, se quema la Filarmónica de Berlín... Triste colofón tras saber que uno de los programas históricos de la radio española, centrado en la música clásica, puede verse abocado al cierre. “Clásicos Populares”, que durante décadas ha sido dirigido y presentado por Fernando Argenta y Araceli González campa, se ve abocado al cierre, víctima de un expediente de regulación de empleo (ERE) en RTVE que, sobre todo, se ha cargado a enormes profesionales que aún tenían muchos años de vida por delante. A finales de 2007 Araceli se acogió al ERE y desapareció de las ondas, y Argenta puede que siga sus pasos y con él todo el programa, y eso sería una horrible noticia. No puedo presumir de haber oído mucho el programa, porque su horario, oscilante habitualmente entre las 15:00 y 16:00 entre semana, no me ha permitido acceder a él, pero muchas personas son fieles seguidoras de un programa que, a parte de poner magnífica música clásica (valga la redundancia) ha conseguido hacerla accesible a todo el mundo. Existe un miedo atroz por parte de mucha gente a oír a Bach, Mozart, Hendel o a quienes ustedes prefieran. “Eso es de mayores”, “hay que saber mucho para escuchar eso” o cosas por el estilo son comentarios habituales al hablar de este tipo de música. Fernando y Araceli no sólo han bajado de ese pedestal elitista a estos músicos y sus obras, sino que han hecho entender a sus oyentes que esta música, como cualquier otro arte, tiene como objetivo principal el disfrute, el deleite y la emoción. Si luego uno sabe lo que es el contrapunto y es capaz de analizar “El Arte de la Fuga” BWV 1080 de Bach, mejor que mejor, pero sobre todo es cuestión de emocionarse, y oír. Además consiguieron hacer un programa divertido, ameno y cercano, ganándose incluso algunas críticas de profesionales de la música que viven izados en sus pedestales pero parecen desconocer el concepto de le emoción o, simplemente, la alegría. El día que “Clásicos Populares“ se acabe algo muy bonito e importante habrá llegado a su fin, y estaremos peor que de mientras el programa existía.
Pero lo que parece ser decisivo para RTVE, la prensa, los medios, y todo el mundo es.... Eurovisión. En medio de una de las campañas de marketing más zafias, burdas y abusivas que recuerdo, el “ente” está tirando dinero público a manotazos para patrocinar a un cantante (??) creado como producto por una cadena privada de la competencia, que es la que explota y se leva el rédito económico de la inversión de la televisión pública. Empiezan a aparecer anuncios que usan esa horrible música (?????) como es el caso de la ONCE, y este Sábado todos a ver la tele, por si ganamos el concurso a la zafiedad del año.... y que arda la Filarmónica y se quemen los músicos dentro, que lo importante es el perreo!!!!!!!
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