Según comenta El Mundo, “la Sociedad Geográfica Española ha concedido su Premio Anual a la mejor iniciativa o empresa a Google Earth, "por haber hecho realidad el sueño de todos los amantes de la cartografía" y la geografía al crear "el más revolucionario atlas", un software que permite a los internautas tener acceso directo y real a cualquier parte del planeta Tierra y navegar por imágenes de satélite de todo el planeta.” Creo que este es un premio merecido, pero intuyo que aún no somos capaces de calibrar el alcance y la importancia que herramientas como Google Earth tienen en nuestra vida diaria, y en lo que pensamos y sentimos respecto al mundo en el que vivimos. Para los que no lo conozcan, es una aplicación desarrollada por Google que se instala en el ordenador. Se lanza y conecta al servidor Google, y permite volar alrededor del mundo cartografiado por imágenes de satélite que van desde una resolución media para zonas no habitadas a resoluciones dignas de película de espía (calles, coches, sombras de farolas..) en zonas urbanas, principalmente occidentales, aunque el catálogo de zonas muy definidas crece día a día. Sobre el se pueden superponer callejeros, información de hitos geográficos, coordenadas GPS, medir distancias, etc.
La primera vez que lo arranqué me quedé fascinado. La imagen de una pequeña bola azulada, la tierra, en el espacio, que se acerca, se hace enorme, y desde una altura de 4.000 millas se ofrece la navegante para ir adonde le plazca. La sensación de control poder y posibilidades es infinita. Es, como dice la Sociedad Geográfica Española, el sueño del cartógrafo, pero es mucho más. Por primera vez se puede decir que tenemos, que uno mismo tiene el mundo en sus manos, literalmente, y se da cuenta de lo frágil que puede llegar a ser. La imagen de Charlot jugando con la bola del mundo, imaginando cambios, soñando que va de un lado a otro al instante es posible. Nunca, ni los personajes más poderosos del mundo (reyes, gobernantes, Papas, etc) han podido ni soñar con disponer de algo por el estilo, y mira que lo han deseado. Una visita por la soberbia Biblioteca del Monasterio del Escorial muestra lo importante que ha sido la cartografía para los gobiernos y poderosos, y para el control y desarrollo de las naciones, y ahora eso como nunca se había imaginado, al alcance de la mano........ es maravilloso.
Y no es más que el reflejo de eso que llamamos Internet, uno de los inventos más revolucionarios de la historia, que poco a poco, saltando las burbujas, está cambiando toda nuestra imagen del mundo, la información y el acceso al conocimiento. Quizás Google, en su conjunto, sea un paradigma de esa revolución. En febrero de 2002, en una visita que hice a San Francisco a una de mis mejores amigas, le “engañé” para dar una paseo turístico por las sedes de algunas de las empresas de Internet, ya famosas entonces, pero no tanto como ahora. Fuimos a HP, SUN, Altavista, Yahoo, Google.... “Almu”, mi querida amiga, me sacó una foto a la entrada de Google, en un edificio no muy espectacular, pero tengo la impresión de que nunca he estado más cerca de eso que llamamos genialidad que hasta en ese momento, tocando el lugar donde se crean los sueños, donde se imagina el mañana, donde el futuro se hace posible.....
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